Nosotros no empleamos la democracia como paso o compás de espera para el socialismo o el comunismo; para nosotros, la democracia es una meta en sí. No queremos pan sin libertad como en Rusia. O libertad sin pan como en otras partes. Queremos ambas cosas. No queremos arrebatar la riqueza a los ricos para dársela a los pobres; lo que perseguimos es crear nuevas riquezas para aquellos que no tienen ninguna. No queremos dictadores desde arriba, como en el fascismo, ni dictadores desde abajo como en el comunismo.

Víctor Raúl Haya de la Torre, entrevista con el periodista Harry Hirschfeld, 23 de abril de 1946.

viernes, 30 de diciembre de 2011

COLOQUIOS: III Programa



Con la conducción del destacado historiador y director del Ojo Izquierdo Hugo Vallenas Málaga

Esta semana en COLOQUIOS discutimos: 


 1) Los argumentos legales detrás del pedido de indulto al ex presidente Alberto Fujimori.


Filósofo José Bulnes
2) La fallida inscripción electoral del Movadef, brazo político de Sendero Luminoso.

3) Cómo fue la célebre polémica sobre el indigenismo de Luis Alberto Sánchez y José Carlos Mariátegui en 1927.





Comentan: AGUSTÍN HAYA DE LA TORRE,  LUIS ZALDÍVAR SCHRADER,  el abogado MANUEL FUENTES-RIVERA  y el filósofo JOSÉ BULNES

La próxima semana en COLOQUIOS:
Democracia y dictadura en el Perú.


Míranos en directo los jueves a las 4 pm en el website del canal TVI:

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Volviendo a una comparación antipática: Manuel Pardo y Haya de la Torre. Por Renzo Ibañez Noel


Renzo Ibañez

Haya de la Torre dijo en uno de sus célebres discursos, con motivo del Día de la Fraternidad de 1961, que no bastaba que su partido defendiera la democracia; hacía falta que los demás partidos democráticos también lo hicieran consecuentemente. En esa oportunidad hizo una elocuente invocación a sus más enconados adversarios: “¡Necesitamos otros partidos! ¡No queremos estar solos! ¡No se nos tache de partido único porque los otros no saben organizarse! ¡Es necesario que se organicen!” Incluso, con gran sentido del humor, ofreció enviar instructores apristas para ayudar a organizar esos partidos.

Más allá de la anécdota, este es un tema delicado e importante. No hay gobernabilidad ni estabilidad institucional democrática sin juego de partidos. Y seguimos sufriendo del mismo inveterado caudillismo y la ausencia crónica de partidos estables. Nuestra clase política no sólo es ingrata con quienes enarbolaron cambios, como Haya de la Torre o Mariátegui, también es ingrata, acaso más, con quienes fueron paladines del Estado constitucional de derecho, del parlamentarismo y de la democracia de partidos, como fue el caso de don Manuel Pardo y Lavalle (Lima, 1834-1878), fundador del Partido Civil (1871) y Presidente de la República entre 1872-1876. Manuel Pardo, hijo del gran poeta, periodista y comediógrafo Felipe Pardo y Aliaga, fue el primer político civil en llegar a Palacio de Gobierno por el voto ciudadano y el segundo gobernante que pudo concluir su mandato sin ser derrocado (el primero fue el general Ramón Castilla entre 1845 y 1851).

Haya de la Torre con sindicalistas
Salvando las distancias y los distintos intereses sociales representados, tanto Pardo, un liberal moderado, como Haya de la Torre, que profesaba la izquierda democrática, lucharon contra el status quo de sus respectivos tiempos, así mismo, fueron profundamente antimilitaristas, quizás por eso los tildaron de enemigos tanto de la religión católica como del ejército, nada más alejado de la realidad. Para muestra un botón, el líder civilista rezaba que “…El militarismo es el enemigo más formidable del verdadero ejército, es lo que lo corrompe, lo que desacredita, lo que vulgariza, lo que ahoga todos los elementos nobles, dignos y abnegados que se encuentran bajo el uniforme”, y sabía lo que decía ya que había sido testigo de la sangrienta insurgencia de los hermanos Gutiérrez contra el presidente Balta; a su vez, el jefe aprista expuso en su Discurso-Programa de 1931: “…Nuestra adhesión a los Institutos Armados no es un recurso oratorio del momento, está basada en nuestro concepto económico y político del Estado; es un resultado lógico de nuestra ideología, un resultado lógico de nuestro programa de reorganización.”.

Ambos líderes fueron satanizados por los sectores más conservadores, Pardo por la vieja oligarquía estanciera nostálgica del esclavismo, Haya de la Torre por el latifundismo reacio a la modernidad y cobijador del gamonalismo; y por si fuera poco,  siendo candidatos, Pardo con 38 años y Haya de la Torre con 36, el intento de fraude y el fraude consumado no les fue ajeno. Por otro lado, la historia nos muestra a estos dos líderes de partido como políticos entregados en cuerpo y alma a sus proyectos nacionales, por un lado Manuel Pardo, con una gran experiencia en el Estado como Director de la Beneficencia Pública de Lima (1868) y como Alcalde de la misma ciudad (1869-1870) y por otro, Haya de la Torre aunque sin ese “plus” pero con el empeño de impulsar una gigantesca renovación social por medio de una reestructuración estatal y un nuevo modo de inclusión del capital extranjero al desarrollo nacional. A pesar de los cargos que tuvieron, el conocimiento que adquirieron y su común linaje aristócrata, fueron caudillos que también conectaron con una amplia ciudadanía y lograron cimentar férreas lealtades, Pardo con la nueva clase media que aspiraba a ser una clase empresarial y Haya de la Torre con las modernas clases trabajadores anhelantes de dignidad y justicia social.

Manuel Pardo
Tanto Pardo como Haya de la Torre se opusieron al encono antidemocrático con esfuerzos de concertación. Pardo impulsó la idea de un acuerdo permanente entre los grupos políticos democráticos para contener el nuevo militarismo representado por Mariano Ignacio Prado, pero sus principales adversarios (fundadores del Partido Nacional en 1877) lo acusaron de querer establecer una “argolla” y un “despótico exclusivismo”. Por su parte, para evitar nuevos golpes de Estado, Haya de la Torre propuso la “convivencia” en 1956 y la Coalición parlamentaria en 1963, que fue motejada como “un pacto con el diablo”. Pardo y el civilismo fueron sistemáticamente denigrados por el diario clerical “La Sociedad”. Haya de la Torre y el aprismo tuvieron su némesis en el diario mercantilista “El Comercio”. Ambos también fueron objeto de intrigas letales. Pardo sufrió un atentado criminal el 22 de agosto de 1874, siendo Presidente de la República, y finalmente murió asesinado por un fanático militarista el 16 de noviembre de 1878, siendo presidente del senado; a su vez, Haya de la Torre sufrió no menos de tres atentados durante el período conocido como “la gran clandestinidad” (1934-1945).

 Por supuesto, dentro de estas similitudes hay una gran diferencia. Pardo representó a las nuevas clases medias de su tiempo pero también al empresariado liberal surgido del apogeo de la explotación de guano y el salitre. Detrás de Manuel Pardo, quien era hacendado y además Presidente del Banco del Perú (este banco, junto con el Nacional y el Providencia tenían el magnífico negocio de ser socios de la Compañía Administradora del Estanco del Salitre, formada en 1873), había lo que hoy podríamos llamar un “lobby” de poderosos empresarios nativos y foráneos, como los banqueros y aseguradores del grupo representado por Emilio Forero (Presidente del Banco Garantizador), el contratista de obras civiles Henry J. Meiggs,  los industriales metal mecánicos y cerveceros Jacob Backus y Howard Johnston, el fabricante de golosinas Arthur Field y otros más que ejercían el monopolio en sus actividades manufactureras, junto con los marinos mercantes explotadores del tráfico de inmigrantes asiáticos como los Grace y los Bryce, de origen irlandés. Fue contra Pardo y el Partido Civil que el joven periodista chiclayano José Andrés Torres Paz (1857-1881, muerto en la defensa de Lima) acuñó por primera vez el término “oligarquía” en el vocabulario político peruano. Su folleto “La oligarquía y la crisis”, que fuera motivo de una disertación del autor el 20 de agosto de 1877, pretende alertar sobre el peligro que significaría para el futuro del país que los poderosos intereses económicos albergados por el civilismo llegaran a controlar el Estado.

En el caso de Haya de la Torre y el aprismo, hubo un temor semejante proveniente de una base social totalmente diferente. El poder que el aprismo mostraba en los sindicatos de obreros fabriles, mineros, portuarios, pescadores, transportistas, maestros, empleados bancarios y de comercio, así como comunidades campesinas, cooperativas de artesanos, escuelas politécnicas y universidades, era considerado una fuente de “chantaje social” y dictadura fascista, como lo confiesa el instigador de estas acusaciones tremendistas, Eudocio Ravines, en su libro de memorias La Gran Estafa.

Aún así, ha sido por el magisterio político de sus líderes que el civilismo fue mucho más que un apéndice de intereses económicos: fue sobre todo una escuela de ciudadanía en una época fuertemente sesgada hacia el militarismo. Y el aprismo siempre fue mucho más que un partido aglutinador de sindicatos: fue sobre todo el partido-escuela del ciudadano defensor de un cambio social responsable. En el civilismo hubo mucho más que un lobby de empresarios: hubo multitudes de ciudadanos esperanzados en una verdadera democracia; del mismo modo que en el aprismo hubo grandes multitudes de hombres y mujeres no sindicalizados anhelantes de una democracia de pan con libertad.

Sin embargo, todo proyecto político serio debe pasar por procesos de renovación pues es vital que la organización sobreviva a la muerte del fundador. Ello no significa un simple relanzamiento sino que esta renovación debe contar con otros elementos como la participación de nueva sangre, nuevos líderes que suplan a los líderes envejecidos para que con ello la organización pueda aportar nuevas ideas para la superación de los problemas nacionales. Esto quiere decir la construcción de un nuevo programa que dé nuevas respuestas a los nuevos desafíos, para ello es inexorable una nueva generación.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Lo nuevo: Biblioteca de la Puente Uceda


En el Ojo Izquierdo tenemos como consigna hacer llegar material fuera de edición a la web para que pueda ser utilizado en las investigaciones referidas a los temas que nos interesan. En esta ocasión, hemos preparado la biblioteca Luis de la Puente Uceda dedicada exclusivamente a los movimientos armados de los 60´s. Consideramos importante aumentar la producción sobre este tema para entender efectivamente el panorama político del país aún el día de hoy.

Además, nos mata el morbo

La biblioteca la inauguramos con tres libros


En este libro editado por el Estado luego de la represión de las guerrillas sesenteras tenemos la versión oficialista de los antecedentes y acciones que devinieron en la acción militar que redujo a los guerrilleros. De especial atención es el segmento del libro dedicado a la injerencia extranjera en la preparación de los guerrilleros y el detallado informe de las conversaciones entre las secciones de la guerrilla que suponemos son resultado de trabajo de inteligencia.


En esta edición de Montly Review podemos encontrar el ensayo La Revolución en el Perú: concepciones y perspectivas del guerrillero y secretario general del MIR Luis de la Puente Uceda. Este ensayo recoge el análisis de De La Puente sobre las condiciones para una revolución armada a nivel nacional e internacional; en particular, se refiere al enfoque foquista del MIR, argumentando que “hay que avocarse fundamentalmente al trabajo insurrecional, con la seguridad de que durante la etapa preparatoria concreta de las zonas guerrilleras, y con mayor intensidad después del inicio de las acciones, será posible construir el partido”. Es decir, primero pelean, y luego se ponen de acuerdo.


Un favorito de la casa. Añi Castillo narra los entretelones de la aparición de las guerrillas al más puro estilo de reportero en la escena narrando la historia de las guerrillas, revelando sus nexos con Cuba y dando detalles de las relaciones entre los líderes guerrilleros, incluyendo a Hugo Blanco, Luis de la Puente Uceda, Javier Heraud, entre otros. 

viernes, 23 de diciembre de 2011

COLOQUIOS: II Programa

Conduce el programa el historiador HUGO VALLENAS MÁLAGA, director de la red virtualOJO IZQUIERDO, que agrupa a la nueva intelectualidad.

- ¿ES INDISPENSABLE CAMBIAR EL MODELO MINERO-EXPORTADOR PARA LOGRAR EL DESARROLLO?
- INDIGENISMO: SÁNCHEZ Y MARIÁTEGUI
- DISCRIMINACIÓN SOCIAL EN EL PERÚ


¿Blancos, cholos y zambos no pueden compartir los mismos espacios sociales y culturales? 

Comentan: AGUSTÍN HAYA DE LA TORRE,  LUIS ZALDÍVAR SCHRADER y el destacado politólogo RENZO IBÁÑEZ NOEL

Míranos en directo los jueves a las 4 pm en el website del canal TVI:


lunes, 19 de diciembre de 2011

Agenda del Partido de Izquierda Democrática. Por Angel Montero


Un nuevo año está a punto de llegar y hay algunas propuestas que considero dentro del análisis de nuestros errores debemos plantear (ejercitando la crítica, autocrítica y mutuo crítica como formas permanentes y democráticas en el ejercicio de sus actos que ampara a cada militante, dirigente, simpatizante o interesado de fortalecer y mantener perenne nuestro legado.), ya que no hemos tenido una agenda como Partido en los últimos tiempos, seguramente la razón era apostar a la realización de un gobierno adecuado y que la gente asociara en el futuro con la eficiencia y la eficacia. Creo que esta apuesta tuvo un aspecto débil, puesto que si bien hicimos un gobierno más que bueno, nos vimos reducidos como partido, yendo muchas veces a la deriva, oscilando entre el culto al pasado, los atropellos orgánicos y la inactividad

El día de hoy, en oposición y con un lío organizacional a cuestas, (como muchos considero que no ha sido la peor crisis interna, a pesar de no haber tenido candidato presidencial o municipal). el APRA debe plantearse una agenda mínima que lo vuelva a identificar con las luchas progresistas, democráticas y con los sectores populares del país. Lo menos pertinente en estos momentos es encerrarnos en las paredes de los locales o ser maquinarias juveniles o universitarias de alguna autoridad de la universidad o del Partido (así estemos contados con los dedos de las manos en algunas funcionales), siento además con mucha firmeza y esperanza que esta nueva actitud de un APRA diferente debe venir desde los espíritus jóvenes que claman ser los actores idóneos de la política del siglo XXI.

Según lo dicho líneas arriba planteo que esta agenda mínima incluya cuatro aspectos a tener en cuenta: Un mensaje a la juventud popular para desarrollar una ley de promoción del emprendimiento juvenil; Un mensaje claro a la juventud universitaria para junto con ella impulsar una nueva ley universitaria; Será vital además tener un discurso que promueva la consolidación de un país con inversión, con libertad, que contrarreste la publicidad  anti minera, pero que además esté preocupado por el equilibrio ecológico, y por la justicia social de pan con libertad. También es fundamental promover un nuevo tipo de sindicalismo, que no tenga la consigna desgastada anti empresa, que defienda los derechos de los trabajadores, pero que además forme junto a la empresa una dupla que haga que la producción y la ganancia aumenten.


Angel Montero (a la derecha) en la Navidad del Niño del Pueblo 2010

Desarrollar estos puntos me parecen fundamentales, quizás es utópico que sea realizado por la oficialidad orgánica del PAP, por ejemplo en el manejo de las políticas de la juventud en general no se ha avanzado y sólo hay a la vista esfuerzos internos que no contribuyen a que el aprismo recupere liderazgo social. En este sector se debe avanzar con esfuerzos reflexivos en torno a una nueva reforma universitaria que democratice la toma de decisiones en las universidades y que además las oriente hacia la excelencia, sobre todo a las públicas, que se invierta más en investigación y por otro lado llevar a cabo foros descentralizados para construir iniciativas que apoyen a la juventud emprendedora, dándole facilidades para concretar proyectos que den más trabajo a más jóvenes. (teniendo tantos convenios con instituciones nacionales e internacionales es lamentable enfrascarse en una sola y peor aun no generar los debates que nos han caracterizado en foros internos y/o multipartidarios).

En cuanto al tema sindical, debería repensarse nuestra estrategia, puesto que es más conveniente estrechar lazos con una central sindical con la que históricamente hemos tenido buen entendimiento, que pensar que vamos a tener injerencia desde una secretaría nacional del mismo Partido en los asuntos de los trabajadores. En esta relación histórica que debe reforzarse debemos reorientar los esfuerzos por imponer un estilo sindical no clasista sino constructivo y democrático, no anti empresa, creo además que los estudiantes técnicos y universitarios deben acercarse de nuevo a los sindicalistas e intercambiar apreciaciones sobre el país y el problema de los derechos y las condiciones laborales.

La derecha no está interesada en organizar a la soc. civil
Por último creo que desde todos los frentes debemos impulsar una visión de país que camine hacia el progreso, con justicia social, que aliente la inversión, pero no a cualquier costo, que esté a favor de la minería, pero respetando el medio ambiente. Con posiciones sensatas y con acción social vamos a volver a ganarnos el favor de la gente y reconstruir el APRA. Esto debe hacerse con o sin la venia de la oficialidad del PAP, la construcción del país de la fraternidad y de la patria grande de pan y libertad es tarea de todos, con o sin cargo partidario, en salvaguarda de nuestra emblemática organización.

Viva Haya de la Torre!
Viva la Democracia!
Viva el APRA!

Angel Montero Cáceres
Director de Eventos “Grupo Convicción”
Ex Sec. Gral JAP Región Callao
Militante del PAP CALLAO

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Coloquios Ojo Izquierdo - Televisión por Internet: Este jueves a las 4 p.m.


A partir de este jueves  a las 4 p.m el grupo de televisión por internet TVI presenta los Coloquios Ojo Izquierdo con Hugo Vallenas y sus invitados.


En este primer episodio, Vallenas discute el concepto de inclusión social desde sus orígenes con el ex presidente del CEPLAN Agustín Haya de la Torre y el antropólogo Luis Zaldívar; además, se discute de forma crítica el celebrado libro “Buscando un Inca” de Alberto Flores Galindo.

La semana siguiente se discutirá el problema agrario y las diferentes alternativas al modelo exportador, además de adentrarnos en el mundo de la discriminación con el politólogo Renzo Ibáñez

www.ojoizquierdo.pe


lunes, 12 de diciembre de 2011

Lo que puede enseñar América Latina. Por Jorge G Castañeda


*Traducción por Luis Zaldívar del artículo publicado el 12 de diciembre en el NY Times
*Jorge G. Castañeda es profesor de política y estudios latinoamericanos en la Universidad de Nueva York, sirviendo como ministro de relaciones exteriores de México entre el 2000 y el 2003

Difundimos este interesante artículo del ex ministro de R.R.E.E mexicano Jorge Castañeda sobre la aparición de la clase media latinoamericana y el progresivo deterioro de la clase media estadounidense. En este artículo publicado en el NY Times, el catedrático y político mexicano le pregunta a los habitantes de Estados Unidos si no se dan cuenta de que en esta ocasión América Latina les está dando una lección

Lo que puede enseñar América Latina.

Jorge G. Castañeda

Estados Unidos está último entre los países ricos en el estudio sobre justicia social de la Fundación Bertelsmann publicado este último cuarto, con solamente Grecia, Chile, México y Turquía peor. Ya sea en prevención de la pobreza, pobreza infantil, inequidad de sueldos, o ratings de salud, los Estados Unidos se encuentran debajo de países como España y Corea del Sur para no mencionar Japón, Alemania o Francia.Es otra señal de qué tan mal la está pasando la clase media norteamericana. Guerras, pestes y violencia han devastado a las clases medias de Alemania, Japón, Rusia y Europa oriental en el pasado, pero cuando el humo esclareció y el polvo se asentó, la estructura social era similar a la que existía y siempre volvía a surgir.

Ninguna nación ha perdido una clase media ya conformada, y los Estados Unidos todavía no deben preocuparse de ello, pero el porcentaje de los ingresos nacionales mantenidos por el 1% de norteamericanos pasó de un 10% en 1980 a 24% en el 2007, una señal verdaderamente preocupante.
Si un estereotipo geográfico tiene algo de verdad, ese sería el que dice que América Latina tiene un puñado de magnates adinerados que mantienen el poder  sobre un mar de pobreza. Si alguna vez ha habido un cliché con raíces en la realidad, sería que la vasta clase media ha sido siempre el respaldo de la fortaleza estadounidense.

Si la clase media desaparece, ¿cómo lucirían los Estados Unidos? Bueno, lucirían como lucía América Latina hace un tiempo, y que está intentando dejar de ser.

Aquí hay dos preguntas: ¿Estados Unidos quiere en verdad parecerse a lo que era América Latina? Y  la otra es ¿Estados Unidos puede aprender la lección de sus vecinos sureños respecto a lo increíblemente difícil que es revertir la inequidad?